La historia de cómo Sarah Hyland ganó la pelea por su salud entre bambalinas de “Modern Family”
La historia de cómo Sarah Hyland ganó la pelea por su salud entre bambalinas de “Modern Family”
La salud es un tema que muchas veces damos por sentado. Creemos que las enfermedades y los fallos graves no llegan hasta tener una mayoría de edad, pero este no es siempre el caso. Sarah Hyland lo vivió en primera fila, y no le apena compartir sus batallas y cicatrices con el mundo, balanceando su salud mental, sus relaciones y su carrera con la displasia renal.
En Genial.guru nos encanta contagiarnos de la fortaleza que tienen las personas para sobrellevar los problemas a los cuales las enfrenta la vida, por eso queremos compartirte esta historia.
Sarah Hyland nació en 1990 con una condición llamada displasia renal, que involucra el mal desarrollo de los riñones de un feto durante su crecimiento en la matriz. La razón por la que esto puede ocurrir principalmente es por genética, y le sucede a uno de cada 4000 bebés.
El tratamiento de esta condición depende de si la displasia ocurre en uno o ambos riñones; en el segundo caso requiere diálisis y un trasplante de riñón, que es la situación que vivió Sarah. Algunos efectos que sufrió fueron cansancio extremo, debilidad y cambios en su apariencia física, como pérdida de peso e hinchazón en la cara.
A lo largo de su vida y de su lucha contra la displasia renal, Sarah ha pasado por más de 16 cirugías, comenzando con ellas antes de cumplir los cuatro años. Desde que fue diagnosticada, su familia ha hecho todo lo posible por apoyarla y estar para ella, y esto quedó demostrado en 2012, cuando tuvo su primer trasplante de riñón, que fue donado por su padre.
Todo iba bien para Sarah, hasta que llegó 2017, el que ella determinó en una entrevista como “el peor y mejor año de mi vida”. Su cuerpo comenzó a rechazar el riñón que recibió unos años atrás y, a pesar de poner todo su esfuerzo por no perderlo, tuvo que someterse nuevamente a diálisis y a un segundo trasplante, en esta ocasión, donado por su hermano menor.
Sarah se denomina a sí misma como una workaholic (adicta al trabajo). Su carrera y su empleo son muy importantes para ella, por lo que balancear sus tratamientos con su profesión era una prioridad. Buscó acomodar sus sesiones de diálisis en días no hábiles para poder estar la mayor parte del tiempo en el set, filmando su papel en la serie de televisión Modern Family, incluso eligiendo un centro médico cercano al estudio de filmación.
Desafortunadamente, no todos los días eran buenos. Sarah estaba constantemente cansada y se dormía en el set, y acercándose la fecha de su segundo trasplante, se le dificultaba permanecer más de 8 horas despierta. Incluso ha mencionado en algunos momentos que hay episodios que no recuerda haber grabado en lo absoluto. Definitivamente no podemos evitar admirar totalmente la fortaleza que esta excelente actriz tuvo al soportar trabajar tantas horas aún con lo débil que se llegaba a sentir.
A pesar de la gran fortaleza que siempre mostraba, Hyland pasó por momentos muy difíciles con respecto a su salud mental cuando recibió la noticia de que su primer trasplante de riñón estaba siendo rechazado por su cuerpo. En una entrevista, ella mencionó: “Estaba muy deprimida. Cuando un miembro de la familia te da una segunda oportunidad de vida, y falla, esta casi se siente como si fuera tu culpa. No lo es. Pero así se siente”.
Sarah se sentía como una carga para su familia, siempre teniendo que ser cuidada por sus problemas. Se sentía indefensa. Fue capaz de sobrellevar y mejorar su estado de salud mental encontrando ayuda psicológica. Actualmente habla sobre el cómo compartir tus problemas y buscar ayuda no te hace débil; no tienes por qué negar este apoyo por orgullo.
Sarah actualmente vive muy feliz, por lo que nos deja observar en sus redes sociales. Está comprometida, y constantemente se encuentra rodeada de familia, amigos y seres queridos. Su salud está estable y, a pesar de tener que vivir con medicamentos para su enfermedad crónica, maneja un régimen de cuidado de piel que le ayuda a combatir los efectos secundarios de esta.
Definitivamente, Sarah y su historia son una gran inspiración para mostrar que realmente podemos contra cualquier problema que se nos presente. Ella mencionó en sus redes: “Después de que decidí seguir luchando, como siempre lo he hecho, todo encajó, y estoy más feliz que nunca”.