La salud femenina es un tema del que cada vez se habla más y más. Según una encuesta nacional, casi el 13% de las mujeres mayores de 18 años tienen una salud apenas satisfactoria o deficiente. Al mismo tiempo, una encuesta reciente mostró que el 56% de las mujeres subestiman la importancia de los chequeos médicos periódicos y la realización de exámenes. Pero cada representante del género femenino debe someterse a un examen general al menos una vez cada 2 años. Y, dependiendo de la edad, vale la pena prestar atención a ciertos aspectos de la salud. En este artículo te explicaremos cuáles son.

Genial.guru recopiló las preguntas más importantes que debes hacerle a tu médico en diferentes etapas de tu vida.

20 años

Según las investigaciones, últimamente, a partir de los 20 años de edad ya existe el riesgo de desarrollar cáncer de mama. Según un estudio reciente realizado por un equipo de científicos de la Universidad Estatal de Maringa en Brasil, se está observando una tendencia de aumento de la mortalidad por cáncer de mama en el grupo de edad de 20 a 49 años.

Para evitar una enfermedad grave, todas las chicas de 18 – 22 años deben programar una consulta con un mastólogo, incluso si no tienen problemas evidentes. La mamografía es el estudio principal que ayuda a detectar las enfermedades de las mamas. Pero a una edad tan joven, puede limitarse a un examen de ultrasonido si el médico no recomienda realizar otro estudio.

• « ¿En qué estado están mis hormonas? »

El cuerpo de una mujer de 20-30 años está constantemente expuesto a la fatiga y estrés intensos. Esto se debe al deseo de seguir varias dietas, la presión de los estudios, las horas extra por el bien de la carrera, fiestas hasta la mañana y la falta de sueño. El estilo de vida incorrecto, el agotamiento físico, la nutrición inadecuada y limitada influyen fuertemente en el nivel de hormonas femeninas.

El desequilibrio de las hormonas provoca cambios bruscos en el estado de ánimo, depresión, pérdida de cabello, erupciones en la piel, cambios de peso. Por lo tanto, a la edad de 20-30 años vale la pena verificar el nivel de tus hormonas.

• « ¿Corro el riesgo de desarrollar síndrome de ovarios poliquísticos? »

El síndrome de ovarios poliquísticos está presente en cada décima mujer de edad reproductiva. Además, según un estudio realizado por un grupo de científicos de la Universidad de Adelaida, casi el 70% de las mujeres con esta enfermedad no sospechaban sufrirlo. Actualmente, esta enfermedad se está convirtiendo casi en una epidemia.

El ovario poliquístico es la causa más común de infertilidad en las mujeres. Incluso si la mujer pudo concebir un bebé, el riesgo de complicaciones es alto. Consultando a un médico y realizando las pruebas por adelantado, evitarás complicaciones más graves en el futuro. La mayoría de las personas en riesgo son chicas jóvenes con historial médico familiar, ciclos irregulares y diabetes.

30 años

• « ¿Está todo bien con mi digestión? »

Después de los 30 años, el sistema digestivo comienza a disminuir gradualmente. El metabolismo no es tan rápido como lo fue en los 20. Un buen estado del sistema digestivo es importante para garantizar el buen funcionamiento de los sistemas endocrino y cardiovascular. Los síntomas como el reflujo, el estreñimiento y la hinchazón son signos de que deberías hacerte exámenes y cambiar tu dieta.

• « ¿Están bien mis marcas de nacimiento y lunares? »

Fíjate bien en las marcas de nacimiento y lunares en tu piel. Las formaciones nuevas que aparecen en la piel después de los 25-30 años, lo más probable es que ya no sean lunares. No son obligatoriamente malignos. Estas formaciones suelen ser signos de fotoenvejecimiento: daño y marchitez de la piel por la influencia de los rayos ultravioletas.

Según los resultados del estudio de un grupo de científicos de la Universidad Católica de Valencia, las lesiones cutáneas malignas son de naturaleza tardía. Los primeros casos ocurren más frecuentemente después de los 30 años, y es durante este período que las mujeres corren un riesgo mayor que los hombres. Por lo tanto, a esta edad, una mujer debe visitar a un dermatólogo y oncodermatólogo.

• « ¿Corro el riesgo de desarrollar el síndrome de desnutrición ovárica temprana? »

El síndrome de desnutrición ovárica se caracteriza por la aparición de síntomas de la menopausia a una edad temprana (hasta los 40 años). El mayor riesgo cae en la edad de 35-40 años. Este síndrome tiene síntomas característicos: amenorrea secundaria, infertilidad y trastornos vegetativo-vasculares.

Además, se acompaña de manifestaciones vegetativo-vasculares características de la menopausia: sofocos, sudoración, irritabilidad, trastornos del sueño y dolores de cabeza. En caso de cualquier cambio, consulta inmediatamente a un médico. En este caso, la metrosalpingografía es uno de los métodos de diagnóstico más informativos.

40 años

• « ¿Cuál es mi nivel de hormonas? »

La década después de los 40 años en la vida de una mujer se asocia con los cambios más significativos en las hormonas. Al observar las hormonas de la progesterona y el estrógeno y asegurarse de que su nivel no sea demasiado alto o demasiado bajo, se puede prevenir el cáncer y otras enfermedades que enfrentan las mujeres de más de 40 años.

• « ¿En qué condiciones está mi glándula tiroides? »

La premenopausia, es decir, 5-10 años antes de la menopausia, es un período importante de diagnóstico de la glándula tiroides. Las fallas en la glándula tiroides causan cambios negativos en el cuerpo femenino. Influye en los sistemas metabólico, nervioso, cardiovascular y reproductivo. Por lo menos una vez al año debes hacerte exámenes de sangre para verificar el nivel de las hormonas T3, T4, así como TTG, porque están en relación inversa.

• « ¿Cuál es mi nivel de hemoglobina? »

Pocas mujeres maduras pueden jactarse de tener un contenido normal de hemoglobina en la sangre. Debido al aumento o disminución de los niveles de hemoglobina, aparecen problemas de salud y malestar. La disminución del nivel de hemoglobina se llama anemia. Muy a menudo, la anemia es experimentada por mujeres que consumen pocos alimentos ricos en hierro, o que son adictas a las dietas. El tabaco y consumo insuficiente de agua contribuyen al aumento de la hemoglobina. La falta de diagnóstico y tratamiento correspondiente por no realizarse los exámenes a tiempo puede causar complicaciones peligrosas, cómo tromboembolismo.

50 años

• « ¿Necesito un escaneo de mis huesos? »

A la edad de 50 años aparece un alto riesgo de osteoporosis. Una exploración oportuna de los huesos ayudará a prevenir problemas de salud posteriores.

El uso de ciertos medicamentos cómo heparina, cortisona y prednisona, así como enfermedades como el hipertiroidismo y la enfermedad celíaca, pueden acelerar la progresión de la osteoporosis. No te olvides de la importancia del calcio para la salud femenina. Los Institutos Nacionales de Salud recomiendan que las mujeres mayores de 50 años reciban 1 200 mg de calcio por día. Además, la actividad física correcta mejora la salud ósea.

• « ¿Tengo problemas con el sistema cardiovascular? »

Las mujeres enfrentan enfermedades del corazón después de los 55 años. Averigua si te encuentras en el grupo de riesgo. El tabaquismo, el abuso de alcohol y la baja actividad física son algunos de los principales factores de riesgo. La falta constante de sueño y el estrés psicológico debilitan el sistema inmune y causan arritmia y disfunción cardíaca en general.

Para evitar problemas en el futuro, debes someterte a una serie de pruebas: determinar el nivel de colesterol en la sangre, medir regularmente tu presión arterial, controlar tu dieta y el peso

• « ¿Por qué aumento de peso? »

La edad promedio de la menopausia es de 52 años, y cuando ocurre, los ovarios detienen la producción de estrógeno. Lo que, a su vez, puede dar lugar a una serie de efectos secundarios (trastornos del sueño, mareos, disminución del deseo sexual), y uno de los más frecuentes es el aumento de peso.

Por lo tanto, si de repente aumentas de peso y no puedes bajarlo, habla con tu médico. La consulta ayudará a identificar otros signos de la menopausia y desarrollar un sistema de nutrición más efectivo, así como los ejercicios que se adaptarán a tu estilo de vida.